930 - Salmos. Apresúrate, oh Dios, a ayudarnos. Sal 70:1-2
Descansando en Dios - En podcast av Francisco Atencio
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930 – Sal 70:1-2 – Salmos. Apresúrate, oh Dios, a ayudarnos. Oh Dios, acude a librarme; apresúrate, oh Dios, a socorrerme. Sean avergonzados y confundidos los que buscan mi vida; sean vueltos atrás y avergonzados los que mi mal desean. El salmista se siente angustiado y pide a Dios que le preste ayuda para confundir a los que se alegran de su mal y para que se alegren los justos que le buscan, pues con su liberación verán cumplidas las promesas de protección a los que son fieles a Dios. Este breve Salmo es casi idéntico al Sal 40:13-17. Su repetición probablemente se debe a las diferentes colecciones de salmos en el libro. Este salmo era apropiado para tiempos de oración y ayuno en las comunidades que esperaban una nueva manifestación del poder salvador de Dios. “Oh Dios, sálvame por tu nombre, y con tu poder defiéndeme.”(Sal 54:1). 1. Clamor contra los enemigos (Sal 70:1-3) “Oh Dios, acude a librarme; apresúrate, oh Dios, a socorrerme. Sean avergonzados y confundidos los que buscan mi vida; sean vueltos atrás y avergonzados los que mi mal desean.” (Sal 70:1-2). Cuando otros traicionan la confianza que depositamos en ellos, quebrantan nuestros espíritus. En esos momentos secos, vacíos, debemos unirnos al salmista y suplicar a Dios que se apresure a ayudarnos. “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.” (1Pe 5:6-7). Aunque algunos de los problemas del salmista puedan ser resultado de su propia iniquidad, esto no da el derecho a los enemigos para que se aprovechen de sus fallas. Dios puede humillarle a él, pero no tienen derecho de hacerlo los enemigos de Dios. “Oh hombre, ÉL te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.” (Miq 6:8). Los que se aprovechan de las fallas y debilidades del creyente pueden ser enemigos físicos, pero es claro que también los enemigos espirituales, los poderes malignos, se aprovechan de las debilidades del creyente para causarle problemas. Asi que “Sean vueltos atrás, en pago de su afrenta hecha, los que dicen: ¡Ah! ¡Ah!”(Sal 70:3). Los enemigos del salmista son enemigos de Dios. El salmista desea que Dios sea glorificado. Los enemigos de Dios sean avergonzados y vueltos atrás “Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto.” (Pr 4:18) 2. Confianza en Dios (Sal 70:4-5) “Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, Y digan siempre los que aman tu salvación: Engrandecido sea Dios.”(Sal 70:4). En el polo opuesto de los malos están los que te buscan. Buscar a Dios indica fe, confianza y el reconocimiento de su necesidad. Los que buscan a Dios desean que ¡Dios sea engrandecido!; y ellos sienten gozo. Únicamente Él puede llenar nuestras vidas con su gozo. Junto con el salmista deberíamos clamar: "Apresúrate a mí, oh Dios". Aun en este momento de dificultad, no se olvidó de la alabanza. Por lo tanto, “Alabaré a Jehová en mi vida; cantaré salmos a mi Dios mientras viva.” (Sal 146:2). La alabanza es importante porque nos ayuda a recordar quién es Dios. A menudo nuestras oraciones están llenas de peticiones para nosotros y otros, y nos olvidamos de agradecer a Dios todo lo que ha hecho y adorarlo por lo que El es. No tome a Dios a la ligera ni lo trate como una máquina expendedora de productos. Aun en medio de su temor, David alabó a Dios. “Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios, diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén.” (Ap 7:11-12). “Yo estoy afligido y menesteroso; apresúrate a mí, oh Dios. Ayuda mía y mi libertador eres tú; Oh Jehová, no te detengas.” (Sal 70:5