700 - Rut, mujer virtuosa. Rut 3:11

700 – Rut 3:11 Rut, mujer virtuosa. Ahora pues, no temas, hija mía; yo haré contigo lo que tú digas, pues toda la gente de mi pueblo sabe que eres mujer virtuosa. La mujer no llega a ser virtuosa por su encanto, su belleza física, posición social sino por el temor reverente a Dios. “Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, ésa será alabada.”(Pr 31:30). Rut había hallado favor a los ojos de Booz y había gustado de las supereminentes riquezas de su gracia, pero todavía no había encontrado el reposo de una comunión inquebrantada. No se había unido aún a Booz con el yugo del matrimonio. El estado matrimonial debe ser un descanso, puesto que debe dejar fijo el afecto y establecer una relación para toda la vida. Por tanto, debe emprenderse con gran seriedad, compromiso, y con oración sincera pidiendo dirección, la bendición de Dios, y con sumisión a sus preceptos. “Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. El corazón de su marido está en ella confiado, y no carecerá de ganancias.” (Pr 31:10-11). 1. Un pariente redentor (Rut 3:1-5). Noemí planifica para que Rut sea redimida por Booz el pariente redentor y le da instrucciones diciendo: “Hija mía, ¿no he de buscar hogar para ti, para que te vaya bien? ¿No es Booz nuestro pariente, con cuyas criadas tú has estado? He aquí que él avienta esta noche la parva de las cebadas.” Dios colocó en Noemí la unión en matrimonio de Rut con Booz como solución para obtener un hogar para descanso, reposo, y salir de la pobreza. Jesucristo es nuestro pariente redentor, “sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación” (1Pe 1:18-19). Esto garantiza nuestra herencia eterna. “Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.” (1Co 6:20). Rut con fe y obediencia respondió a Noemí: “Haré todo lo que tú me mandes.” (Rut 3:5). 2. Rut solicita ser redimida (Rut 3:7-10). Luego que Booz se retiró a dormir Rut “vino calladamente, y le descubrió los pies y se acostó” (Rut 3:7). A la medianoche Booz se despertó. “Entonces él dijo: ¿Quién eres? Y ella respondió: Yo soy Rut tu sierva; extiende el borde de tu capa sobre tu sierva, por cuanto eres pariente cercano.” (Rut 3:9). Extender el " el borde de tu capa sobre tu sierva " era una costumbre nupcial, solicitud de ser redimida, mediante el matrimonio según la ley del levirato (Dt 25:5-10). Dios recordando la iniciativa para entrar en pacto como un matrimonio con Israel dice: “Y pasé yo otra vez junto a ti, y te miré, y he aquí que tu tiempo era tiempo de amores; y extendí mi manto sobre ti, y cubrí tu desnudez; y te di juramento y entré en pacto contigo, dice Jehová el Señor, y fuiste mía.”(Ez 16:8). Cristo es nuestro único y suficiente redentor “en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia” (Ef 1:7). Nosotros preguntemos como Pablo: “Señor, ¿qué quieres que yo haga?” (Hch 9:6). 3. Rut recibió su promesa (Rut 3:10-13). Booz reconoce la lealtad de Rut para con su familia diciendo: “Bendita seas tú de Jehová, hija mía; has hecho mejor tu postrera bondad que la primera, no yendo en busca de los jóvenes, sean pobres o ricos.” (Rut 3:10). Rut personifica la excelencia en todos los aspectos de la mujer virtuosa (Pr 31:10-31) y es la única con ese título en la Biblia, reconocida por Booz y todo el pueblo al afirmar: “Ahora pues, no temas, hija mía; yo haré contigo lo que tú digas, pues toda la gente de mi pueblo sabe que eres mujer virtuosa.” (Rut 3:11). Booz sin niguna duda promete actuar diligentemente como pariente redentor. “Y ahora, aunque es cierto que yo soy pariente cercano, con todo eso hay pariente más cercano que yo. Pasa aquí la noche, y cuando