692 - Abimelec, la zarza de fuego. Jue 9:15

692 – Jue 9:15 Abimelec, la zarza de fuego. Y la zarza respondió a los árboles: Si en verdad me elegís por rey sobre vosotros, venid, abrigaos bajo de mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y devore a los cedros del Líbano. El rey de Israel debía ser Jehová y no un hombre. Pero Abimelec quería usurpar la posición que estaba reservada exclusivamente para Dios. Con la muerte de Gedeón, Abimelec quiso ocupar el lugar de su padre. En su búsqueda egoísta, quitó la vida a todos menos uno de sus setenta medio hermanos por parte de su padre Gedeón. Las personas que tienen deseos egoístas a menudo buscan cumplirlos mediante métodos despiadados. Analice sus ambiciones para ver si están centradas en usted mismo o en Dios. Asegúrese de buscar siempre el cumplimiento de sus deseos de una manera que sean aprobados al pasar por el crisol de la palabra de Dios. Abimelec es un ejemplo donde se cumple el juicio del Dios soberano, justo contra los despiadados gobernantes. La Biblia enseña el destino de los que turban, dañan a la familia: “El que turba su casa heredará viento” (Pr 11:29). 1. Golpe de estado (Jue 9:1-6). Abimelec hijo de Jerobaal fue a Siquem, a los hermanos de su madre, y habló con ellos, y con toda la familia de la casa del padre de su madre, diciendo: Yo os ruego que digáis en oídos de todos los de Siquem: ¿Qué os parece mejor, que os gobiernen setenta hombres, todos los hijos de Jerobaal, o que os gobierne un solo hombre? Acordaos que yo soy hueso vuestro, y carne vuestra. (Jue 9:1-2). Abimelec era hijo de Gedeón (Jerobaal) y busca apoyo con los medios hermanos de su mamá que están en Siquem para gobernar Israel. Los habitantes de Siquem aceptaron la propuesta de Abimelec y financiaron el golpe de estado dándole dinero “con los cuales Abimelec alquiló hombres ociosos y vagabundos, que le siguieron.” (Jue 9:3-4). Abimelec continúa con su plan diabólico, eliminando toda competencia. Usando los mercenarios contratados va a casa de su padre Gedeón en Ofra, y manda a quitar la vida a sesenta y nueve medios hermanos de su padre quedando vivo solo, “Jotam el hijo menor de Jerobaal [Gedeón], que se escondió.” (Jue 9:5). Abimelec logra su objetivo y es elegido rey (Jue 9:6). “¡Ay del impío! Mal le irá, porque según las obras de sus manos le será pagado.” (Is 3:11). 2. Abimelec, la zarza de fuego (Jue 9:7-21). Jotam cuando se enteró que habían elegido a Abimelec rey proclamó una parábola usando los tres árboles más productivos de Israel: el olivo, la higuera y la vid comparado con el peor, la zarza, diciendo: Oídme, varones de Siquem, y así os oiga Dios. Fueron una vez los árboles a elegir rey sobre sí, y dijeron al olivo: Reina sobre nosotros. Mas el olivo respondió: ¿He de dejar mi aceite, con el cual en mí se honra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande sobre los árboles?” (Jue 9:7-9). Los árboles representaban a los setenta hijos de Gedeón, y la zarza representaba a Abimelec. Los árboles productivos no aceptan ser rey. Una persona productiva estaría demasiado ocupada haciendo el bien para perder tiempo con poderes políticos. Por otro lado, una persona inútil estaría contenta de recibir el honor, pero destruiría a la gente a la que gobernaba. “Y dijeron los árboles a la higuera: Anda tú, reina sobre nosotros. Y respondió la higuera: ¿He de dejar mi dulzura y mi buen fruto, para ir a ser grande sobre los árboles? Dijeron luego los árboles a la vid: Pues ven tú, reina sobre nosotros. Y la vid les respondió: ¿He de dejar mi mosto, que alegra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande sobre los árboles? Dijeron entonces todos los árboles a la zarza: Anda tú, reina sobre nosotros. Y la zarza respondió a los árboles: Si en verdad me elegís por rey sobre vosotros, venid, abrigaos bajo de mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y devore a los cedros del Líbano.” (Jue 9:10-15). Abimelec, como una zarza, no pudo ofrecer a Israel protección real ni seguridad. La parábola de Jotam se hizo realidad