639 - Moisés, plagas que predican. Ex 7:17

639 – Ex 7:17 Moisés, plagas que predican. Así ha dicho Jehová: En esto conocerás que yo soy Jehová: he aquí, yo golpearé con la vara que tengo en mi mano el agua que está en el río, y se convertirá en sangre.   Dios castiga a Egipto con juicios, diez plagas para que dejen libre a su pueblo. El juicio de las plagas se da en tres fases: Comienzan como molestias; progresivamente, por la terquedad del faraón, afectan la vida económica del país, y finalmente vienen las tinieblas, el preámbulo a la muerte de los primogénitos de los egipcios. Las plagas fueron juicios de Dios contra todos los dioses de Egipto (Ex 12:12b). “Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad. Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.” (Ro 1:18, 21). P1. El agua convertida en sangre (Ex 7:14-25) “Y Moisés y Aarón hicieron como Jehová lo mandó; y alzando la vara golpeó las aguas que había en el río, en presencia de Faraón y de sus siervos; y todas las aguas que había en el río se convirtieron en sangre.” (Ex 7:20). El Nilo, la fuente de la vida para los egipcios, llegó a ser un instrumento de juicio, caos y muerte; fue contaminado y los peces murieron. Esta plaga dejo en vergüenza a: “Hapi  y Knumg dios y guarda del Nilo.” Esta plaga se repetirá en la tribulación en todos los ríos y mares del planeta (Ap 16:3-4). Faraón, el pueblo, y todo incrédulo rechazan a Dios, “fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua.” (Jer 2:13). P2. Ranas que no dejan dormir (Ex 8:1-15). “Y Jehová dijo a Moisés: Di a Aarón: Extiende tu mano con tu vara sobre los ríos, arroyos y estanques, para que haga subir ranas sobre la tierra de Egipto.” (Ex 8:5). Esta plaga dejo en vergüenza a: “Heqt diosa egipcia en forma de rana.” Faraón, al igual que los incrédulos, prefirió dormir con las ranas en su cama que humillarse ante Dios (Ex 8:9-10). P3. Piojos que no dejan ver (Ex 8:16-19). “Entonces Jehová dijo a Moisés: Di a Aarón: Extiende tu vara y golpea el polvo de la tierra, para que se vuelva piojos por todo el país de Egipto”. Deja en vergüenza a:”Geb dios de la tierra (polvo).” Los hechiceros reconocen ante Faraón: “Dedo de Dios es éste.” (Ex 8:19a). Pero Faraón, y los hechiceros siguen ciegos espirituales y duros de corazón (Ex 8:19b). P4. Moscas molestísimas (Ex 8:20-32). “Y Jehová lo hizo así, y vino toda clase de moscas molestísimas sobre la casa de Faraón, sobre las casas de sus siervos, y sobre todo el país de Egipto; y la tierra fue corrompida a causa de ellas.” Avergonzó a: “Uatchit dios en forma de insecto (mosca).” Faraón al igual que los incrédulos, endurecen su corazón y prefieren vivir y dormir con las moscas sobre su cuerpo. P5. Peste en el ganado (Ex 9:1-7). “Al día siguiente Jehová hizo aquello, y murió todo el ganado de Egipto; mas del ganado de los hijos de Israel no murió uno.” (Ex 9:6). Queda en vergüenza: “Hator diosa en forma de vaca.” Faraón con su corazón de piedra prefiere ser vegetariano al no tener carne para comer. P6. Úlceras que pican (Ex 9:8-12). “Jehová dijo a Moisés y a Aarón: Tomad puñados de ceniza de un horno, y la esparcirá Moisés hacia el cielo delante de Faraón; y vendrá a ser polvo sobre toda la tierra de Egipto, y producirá sarpullido con úlceras en los hombres y en las bestias, por todo el país de Egipto.” Avergonzó a: “Sekemet diosa egipcia con poder de sanar.” Faraón, hechiceros y el pueblo no se arrepienten a pesar del dolor, el hedor y la picazón en todo el cuerpo.” Esta plaga se repite en la tribulación (Ap 16:2). P7. Granizo y fuego (Ex 9:13-35). Faraón no aceptó liberar a Israel y “Hubo, pues, granizo, y fuego mezclado con el granizo, tan grande, cual nunca hubo en toda la tierra de Egipto desde que fue habitada.” El granizo destrozó toda la hierba y árboles de Egipto.