619 - Noé, la fe que condenó al mundo. Gn 6:8
Descansando en Dios - En podcast av Francisco Atencio
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619 – Gn 6:8 Noé, la fe que condenó al mundo. Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová. La unión en yugo desigual entre las familias de los hijos de Dios descendientes de Set con las hijas de los hombres descendientes de Caín, generó una sociedad donde se multiplicaba la maldad, siempre con pensamientos y maquinación para hacer el mal. “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.” (Gn 6:5). Como resultado “se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia. Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra.” (Gn 6:11-12). Por lo tanto, Dios toma una decisión “Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.” (Gn 6:7). “Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.” (Gn 6:8). 1. QUÉ LOGRÓ NOÉ POR LA FE. 1) Noé halló gracia (salvación) ante los ojos de jehová (Gn 6:8). 2) Ser ejemplo vivo a su generación. “Noé, varón justo, era perfecto en sus generaciones; con Dios caminó Noé.”(Gn 6:9). 3) Que el mundo fuera condenado por su maldad e incredulidad, y heredar la justicia, la vida eterna “Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.” (He 11:7). Dios “… no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos” (2Pe 2:5). 4) Obediencia: “hizo conforme a todo lo que dios le mandó” (Gn 6:22). 5) Paciencia para heredar las promesas de Dios (He 6:12). 6) Estar en la lista de los siervos de Dios (Ez 14:14, 20; Jer 15:1). 2. NOÉ, UN TIPO DE CRISTO. 1) Noé enviado para bendición. Noé significa “consuelo, descanso” (Gn 5:29). Dios envió a su Hijo para bendecirnos “A vosotros primeramente, Dios, habiendo levantado a su Hijo, lo envió para que os bendijese, a fin de que cada uno se convierta de su maldad.” (Hch 3:26). 2) Noé encontró gracia a los ojos del Señor (Gn 6:8). Así fue con Cristo. “Éste es mi Hijo amado; a Él oíd” (Lc 9:35). 3) Noé fue justo y perfecto (Gn 6:9). Cristo se deleitaba en hacer la voluntad de Dios. Era santo, inocente, separado de los pecadores. “Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los cielos” (He 7:26) 4) Noé caminaba con Dios (Gn 6:9). Jesús podía decir: “Yo y el Padre uno somos. Tú, oh Padre, en Mí, y Yo en Ti “(Jn 10:30; 17:21). 5) La voluntad de Dios le fue revelada a Noé (Gn 6:13-15). El arca, y su forma, fueron una revelación de Dios. Fue el camino de salvación dado a conocer por medio de Noé. ¿No fue lo mismo con Cristo? Él vino a manifestar su Nombre (Jn 17:6). Cristo no hablaba sus propias palabras, sino las de Dios Padre (Jn 14:10). 6) Noé preparó el camino de salvación (Gn 6:14). Noé hizo el Arca. Cristo ha abierto para nosotros un camino nuevo y vivo (He 10:20). “La dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro” (Ro 6:23). 7) Noé acabó la obra que le había sido encomendada. “Así lo hizo Noé; hizo conforme a todo lo que Dios le mandó” (Gn 6:22; 7:5). No dejó nada sin hacer. Así también Cristo dijo: “He llevado a término la obra que me diste que hiciera” (Jn 17:4). Sus últimas palabras en la cruz fueron: “Consumado es” (Jn 19:30). 8) La salvación preparada por Noé fue eficaz (Gn 7:1). Fue suficiente: E1) Para sí mismo. “Entró Noé al arca” (Gn 7:7). La gran obra de Cristo ha sido el medio de traer nuevo honor y glorias para Él. E2) Para su casa. “Entra tú y toda tu casa en el arca” (Gn 7:1). “Todo lo que el Padre me ha dado vendrá a Mí” (Jn 6:37). Él traerá muchos hijos a la gloria.