1021 - Proverbios. Entendiendo el temor a Dios. Pr 2:6-7

1021 – Pr 2:6-7 – Proverbios. Entendiendo el temor a Dios. Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. El provee de sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rectamente. Muchos creyentes dicen conocer a Dios, pero no tiene respeto por Dios y su palabra. No es posible entender y tener temor de Dios sino conocemos la palabra de Dios. El hijo de Dios se diferencia porque: No discute la palabra de Dios, sus mandamientos para ponerlos en práctica. Reconoce que su Dios Padre está en los cielos, es santo, soberano (Mt 6:9-10). Acepta la disciplina de su Padre celestial (He 12:4-11). Se ocupa de entender y conocer a su Dios Padre (Jer 9:23-24). Vive una vida imitando a su Padre celestial (Ef 5:1-2). El verdadero hijo de Dios entenderá y vivirá en el temor de Dios. “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;” (Jn 1:12). 1. Hijo de Dios (Pr 2:1a). “Hijo mío”, Si queremos ser hijos de Dios debemos reconocer y tener temor de nuestro Padre celestial. Dios tiene: Compasión para los que tienen temor de Dios. “Como el padre se compadece de los hijos, Se compadece Jehová de los que le temen.” (Sal 103:13). Misericordia para los que tienen temor de Dios. “Mas la misericordia de Jehová es desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, Y su justicia sobre los hijos de los hijos” (Sal 103:17). El profeta Malaquías es usado por Dios para enseñar el respeto al Padre celestial. “El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre?” (Mal 1:6). La mejor manera de honrar a Dios como Padre es recibiendo y guardando sus palabras. 2. Qué debemos hacer para entender el temor de Dios. (2:1b-4). “si recibieres mis palabras, Y mis mandamientos guardares dentro de ti” (Pr 2:1b). Los creyentes como hijos de Dios debemos honrar a Dios como Padre. Qué debemos hacer para honrar a Dios como Padre: Recibir, aceptar, guardar, obedecer lo que dice en Su palabra. Acercarse a Dios. Admitir, creer lo que dice Su palabra. Debemos recibir la palabra de Dios con mansedumbre, humildad. “Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.” (Stg 1:21). Además de recibir, ser hacedores de la palabra de Dios para salvación de nuestras almas. (Stg 1:22). Es muy común en las Iglesias que los creyentes sean solo oidores y no hacedores de la palabra de Dios. Por lo tanto, escasea el temor de Dios. ¿Cuántos son hijos de Dios? Todos. ¿Cuántos aman a Dios? Todos. ¿Cuánto amamos a Dios? Mucho. ¿Cuánto es mucho? Jn 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos. El medidor de nuestro amor por Dios es por guardar sus mandamientos. Amamos a Dios en la medida que guardamos sus mandamientos. Que más debe hacer un hijo de Dios: “Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia” (Pr 2:2). El oído atento y el corazón humillado son características de un compromiso con Dios. “Escucharé lo que hablará Jehová Dios; Porque hablará paz a su pueblo y a sus santos, Para que no se vuelvan a la locura.” (Sal 85:8). ¿A qué debe estar atento nuestro oído? A la sabiduría de Dios que es Jesucristo “en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.” (Col 2:3). “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.” (Stg 1:5). Sabiduría (Kjokmá, H2449) significa ciencia, entendimiento, inteligencia, saber, sabiduría, sabio. La sabiduría es la aptitud para vivir una vida piadosa como Dios quiere que el hombre la viva. La habilidad de juzgar y actuar de acuerdo con la guía de Dios.